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HIPÉRICO O HIERBA DE SAN JUAN

Nombre científico: Hypericum perforatum

Familia: Hypericaceae

Índice

Descripción del Hipérico

Hipérico (Hypericum) es un género de plantas con flores que tiene unas 400 especies, la más conocida es el hipérico o hierba de San Juan, (Hypericum perforatum), conocida con dicho nombre ya que suele florecer a finales de junio, coincidiendo con ese santoral.

El termino perforatum viene de unas pequeñas perforaciones o bolsas de aceite esencial que tienen las hojas y pueden verse al trasluz en cada una de las hojas de esta planta. Si aplastamos entre los dedos alguna de sus hojitas, deja una mancha anaranjada en la piel, ya que es el color de su savia.

Es una planta herbácea, originaría de Europa, que crece de forma silvestre al borde de los caminos, en zonas secas y soleadas. Tiene el tallo leñoso y puede llegar a medir 1 metro, sus flores se agrupan en manojos y tienen 5 pétalos de un color amarillo intenso con motas negras en los bordes.

Tiene una distribución casi cosmopolita, no encontrándose en zonas tropicales, desiertos ni regiones polares.

Recolección de la hierba de San Juan

El momento óptimo para recogerlo es cuando la luna está en creciente o llena, al mediodía, cuando el sol se encuentra en todo lo alto, ya que la savia se mueve hacia arriba y se encuentra concentrada en las partes que vamos a cosechar.

Se tiene que dejar sin recolectar al menos un 30% de la planta con flores para que continue su ciclo y podamos disfrutar de la planta el año siguiente.

Propiedades y beneficios del Hipérico

Sus efectos terapéuticos se conocen desde hace siglos, ya Hipócrates indicaba su uso como analgésico y contra la ansiedad.

En la antigüedad era considerada una HIERBA MÁGICA, conocida como “hierba de las heridas” y también como “ahuyenta demonios”.

Muchos de sus beneficios provienen de la hipericina, que es uno de los principios activos de la planta, que actúa como antidepresivo natural activando la dopamina, también como antiinflamatorio y antibacteriano natural.

En infusión se utiliza para curar la tristeza, melancolía o depresión. así como para disminuir la ansiedad y el estrés, ya que relaja el sistema nervioso.

El aceite de hipérico tiene propiedades antiinflamatorias y cicatrizantes, mostrando su efecto positivo en la piel, regenerándola (en cicatrices y estrías), curando los cortes y heridas, llagas, picaduras de insectos, quemaduras leves, escoceduras, ampollas, contusiones y esguinces. Se suele usar el aceite macerado de la planta fresca en flor o también hacer emplastos sobre las heridas.

Contraindicaciones y efectos secundarios

El hipérico es incompatible con el sol, tanto si se utiliza de forma tópica o externa o por vía oral, ya que puede provocar fotosensibilidad. Por lo que durante su uso, hay que protegerse de forma adecuada del sol.

Algunos componentes del hipérico puede producir interacciones con otras sustancias, tales como la digoxina o anticoagulantes orales, debido a una inducción de varias enzimas que metabolizan medicamentos o que afectan a su biodisponibilidad. Por lo tanto, pueden producir disminuciones en los niveles plasmáticos de los medicamentos que utilicen dichas enzimas y por lo tanto una reducción de sus efectos terapéuticos, cuando se toman de forma conjunta con hipérico. Por lo que sí estás tomando algún medicamento, no tomar hipérico sin consultar con un facultativo.

Métodos de preparación

  • Solarización: es una técnica para conservar la energía, la esencia y la magia de las flores. Se utiliza un recipiente de cristal y se van cortando las flores directamente en el mismo, sin tocarlas, para no influenciar con nuestra energía, una vez las tenemos las ponemos con agua de lluvia o manantial al sol durante 4 o 5 horas. Pasado este tiempo se cuela y se guarda ese agua que tiene toda la energía de las flores del hipérico como antidepresivo, este es el método utilizado en las flores de Bach. Posteriormente para conservar ese agua, añadiremos coñac. El porcentaje es el doble de alcohol que de agua.
  • Secado de la planta con flores y una vez secas, guardarlas en botes de cristal para poder usarla durante todo el año en infusiones antidepresivas (1-3 gramos por taza), estas también nos ayudan a dormir y disminuyen la ansiedad y el estrés.
  • Maceración en aceite, para obtener el aceite de hipérico: Se cortan la planta en la parte donde tiene las flores y se mete en un bote de cristal a presión. Una vez lleno el bote (con la planta todavía viva) se cubre con aceite de oliva, se tapa y se deja 40 días al sol y a la sombra, y pasado ese tiempo se pone de un color rojo sangre, colando el aceite y guardándolo en botes de cristal para utilizarlo durante el año. Este aceite se puede utilizar tanto externamente sobre las heridas por su efecto cicatrizante, como internamente bebido, tomado en gotas o cucharaditas, ya que sana internamente la piel del aparato digestivo que va desde la boca hasta el ano, como podrían ser las úlceras.
  • Maceración con alcohol, se llena un bote de cristal con la planta y las flores y después se cubre con un alcohol superior a 35º, y se pone 1 día al sol y 20 días a la sombra. Después de ese tiempo se cuela y ya se puede guardar. Con este método se tomaría 10 gotas sublingualmente (debajo de la lengua), y el efecto es similar a las infusiones.
  • Aceite esencial de hipérico: Se utiliza el alambique, llenando todo el recipiente de flores de hipérico, después se rellena con agua y se pone a fuego lento, pasando por el serpentín hasta el enfriador donde se obtiene el aceite esencial. Se encuentra mucho más concentrado que el aceite de hipérico, pero se utiliza para lo mismo.

Cultivo del Hipérico

Se siembra y planta en primavera, aunque tolera ser sembrado y plantado en verano. Es una planta muy rústica, que se adapta a todo tipo de suelos y climas, tanto frío como cálido. Es perenne, no se encuentra en invierno.

Imágenes para poder identificar el Hipérico en el campo

Detalle de la flor del Hipérico